Por Rosa María de La Paz
Hoy se cumplen nueve años de la publicación de Su Mirada y de una de las aventuras más grandes a las que me invité a vivir. Hoy quiero felicitar a mi libro y, también, a mí misma, ya que en su momento, entre tanta intensidad, no me di el espacio para celebrarlo de verdad.
Sí, ya sé, que en aquel entonces, cuando me preguntaron si era mi historia, respondí que no. Lo siento; no estaba preparada para recibir las críticas ni para todo lo que podría desencadenarse al reconocerlo. ¡Hum! ¿Lo estaré ahora? Muy buena pregunta. Pues bien, ahora sí me arriesgaré… a ver qué pasa.
¿Estás lista para conocer la verdad detrás de Su Mirada? Te invito a sentarte cómodamente y quedarte hasta el final de este relato, donde te lo contaré todo acerca de esta novela romántica con un toque de erotismo, basada en hechos reales que marcaron un antes y un después en mi vida. ¿Te vienes?
Fue una época difícil: algunos familiares, algunas personas protagonistas de la novela, y quienes decían apoyarme me juzgaron sin piedad. Recibí ofensas, reclamaciones y culpas; incluso las personas en las que confiaba me dieron la espalda.
Por un largo tiempo, me dejé arrastrar por la culpa, me sumí en una depresión profunda, dejé de salir de casa hasta que toqué fondo. Ese proceso me llevó a tomar nuevas elecciones, a buscar herramientas que me contribuyeran a salir de la oscuridad, a liberarme, a reconocer quién soy en realidad y a recuperar mi poder personal para diseñar el futuro que hoy es parte de un presente mucho más divertido del que jamás imaginé.
“Hoy sé que detrás de cada suceso hay un regalo escondido; que todo lo que tengo (o no tengo) ha sido elegido y creado por mí en el pasado.”
Después de todos estos años, hoy me atrevo a escribir y hacer público esto. Reconozco que algunas de mis elecciones lastimaron a muchas personas e incluso a mí misma. Hice cosas que juré no hacer jamás, especialmente a otra mujer. Fui ingenua, me enamoré, me cegaron las emociones, me dejé engañar… mejor dicho, “me autoengañé”. Con esto, no busco justificarme ni disculparme, porque no me arrepiento; es parte del camino que me ha llevado a ser quien soy ahora.
Hoy puedo reconocer con tranquilidad que no fui la única responsable. Todas las personas involucradas, de una forma u otra, aportamos nuestro granito de arena. Tampoco espero que me perdonen; para mí, nadie se equivocó, ni siquiera yo. Fueron simplemente elecciones que podemos cambiar en cualquier momento, sin cargar culpas ni remordimientos innecesarios.
Finalmente, cada protagonista de esta hermosa novela hizo las elecciones que creyó eran las mejores en ese momento. Y yo, hoy quiero agradecer a cada uno de ustedes: a quienes me enfrentaron, a quienes se escondieron, a quienes callaron y sufrieron en silencio, a quienes conocían la historia y, al revelarse, me dejaron sola; a quienes decían ser mis amigas y me traicionaron, y también, por supuesto, a quienes me abrazaron y me impulsaron a levantarme y transformar todo. Gracias, gracias, gracias.
Publicar Su Mirada fue un logro inmenso para mí, algo que nunca pensé atreverme a realizar, y sé que puede acompañar a infinidad de personas que se encuentran en situaciones similares.
A ti, que me estás leyendo: cualquiera que sea la circunstancia que estés viviendo, te invito a no buscar culpables ni culparte.
“No hay error, solo elecciones, que puedes cambiar cuando quieras”.
Suelta esas cargas, solo te quitan energía. Si percibes que hay mentiras y no te gusta cómo se ven las cosas, confía en ti, elige algo diferente y da los pasos requeridos para transformar tu vida en infinitas sonrisas. Si yo pude, tú también puedes; la vida es una, ¡y es para vivirla y ser feliz!
Bueno, pues esta es la verdad detrás de Su Mirada… ¿Ya la leíste? Si aún no has tenido la oportunidad de adentrarte en esta fascinante historia, te invito a descubrir no solo un relato de amor y seducción, sino un viaje hacia el poder de la elección y el camino para abrazar la plenitud de ser tú. Cada página es una pieza de vida, escrita sobre momentos de felicidad, sueños, pasión, desencanto, tristeza y esperanzas. Deseo que, a través de sus palabras, encuentres inspiración para emprender tu propio viaje, recibir los retos con amor hacia ti misma y, sobre todo, recuerdes que, más allá de cualquier circunstancia, siempre tienes el poder de elegir y crear una vida llena de alegría, abrazando la magia de ser tú.
¡Atrévete a leer Su Mirada y descubre qué revelaciones tiene para ti!
¿Ya la leíste? Cuéntame… ¿qué te pareció? Te leo en los comentarios de este blog.
¡Nos vemos en Su Mirada!
Un abrazo grande,
María de la Paz

Gracias por leer mis artículos y permitirme
ser parte de tu camino.
Te envío un abrazo lleno de sonrisas, alegría y mis mejores deseos para una vida llena de diversión y sueños cumplidos.
¡Hasta la próxima!
Con cariño
Rosa Mary